
Pensándolo bien, en comparación con Tom, ninguno valdría la pena… Pero no era el momento para pensar con las hormonas, si no de ayudar a su amiga. Se acercó a ella y la abrazó. Eso fue bastante para ella. En un momento se convirtió en una fuente de agua…
Pasaron bastantes minutos hasta que pudo calmarse. Y empezara a dolerle la cabeza… Hacía mucho que no lloraba de aquella manera y la cabeza le daba vueltas… Tuvo que tumbarse en la cama mientras su amiga se sentaba en el sillón del escritorio. Ambas rieron. Mirándolo bien, había sido hasta divertido…
-¿A qué esperas? Pregunta… Te mueres por preguntarme cómo es Bill lejos de las cámaras, se te nota…
-¡Oh, vale! Ahora ya me puedes estar contando todo sobre él, ¿me entiendes? TO-DO.
- Pues… Es exactamente como lo puedes ver en la tele… Es atento, cariñoso, un pelin rebelde… Pero siempre intenta hacer felices a los demás, si esta en su mano… es dulce, y siempre sonríe. Y cuando lo hace de verdad los ojos le brillan y es tan mono… Es… era como mi peluche cuando lo veía así… siempre me abrazaba a él y no lo soltaba… No te pongas celosa, Alice, ya sabes que el que me gustaba era el otro gemelo…
-Ya lo se… Sigue, sigue, que me emociono…
-Es que es así. No hay que darle más vueltas. Es muy tierno, realmente. No esta fingiendo. Es todo lo que ves.
-¡¡Ayyy!! Que monooo…. Es tan rico… ¿Y qué hay de los otros?
-Pues… Gustav es un solitario… Le gusta estar solo de vez en cuando, y siempre iba a su bola, como si todo le resbalara… Pero no era así… Era como un lince… Siempre atento a su alrededor pero nunca interactúa… es un observador nato… Muy callado y reservado… Pero no te lo comas de vista, puede ser el alma de la fiesta si se lo plantea… Es muy calculador… Y siempre sabe lo que le conviene… Y sí, pasa de Tom hasta el culo…
-¿Quién lo diría? – rió- ¿Y Georg?
-Georg tiene mucha tela… Era el hermano mayor sobre protector conmigo… Nadie se podía acercar a mí sin antes hacerle frente al gran Georg… A mi tampoco me importaba, la verdad…
-¿En serio? ¿Y qué pasó con Tom?
-Nada realmente… O eso creo yo… No lo se… Pero muy raro es que lo dejara acercarse a mi… Supongo que habrá gato encerrado… Pues bien, Georg era y espero que siga siendo un buen tío… No se peleaba con nadie si no era estrictamente necesario y era quien siempre ponía paz entre los gemelos. Ya sabes que se pelean continuamente. No te engañes, se adoran. Volviendo a Georg, no era mucho de relacionarse con las personas, le gusta más estar con los amigos de siempre que conocer gente nueva. Simplemente porque no sabe si se le acercan por él o por ser amigo de. Le gusta estar con su bajo. Es su tesoro. Y que nadie se acerque a molestarlo. Pero no es tan duro como hace creer. No se lo digas a nadie pero en el fondo es un tierno… Y sí, es impuntual por naturaleza, siempre llegaba una hora tarde… Hasta el punto que nosotros quedábamos una hora después para que no llegara tarde, y no se cómo se las apañaba que entonces también llegaba al menos diez minutos tarde…
-Vaya… Pobrecito, a lo mejor era por una buena razón…
-No te lo comas mucho de vista… Ya te he dicho que tiene tela…
-Bueno, ¿y Tom? Sinceramente no creo que sea tan macho como dice ser…
-Y no lo es. Siempre ha sido muy exagerado y farda demasiado. Pero no es así… Al menos no cuando yo lo conocí. Antes no era el egocéntrico que es ahora. Era un chico normal. Bueno, lo de “todas se enamoran de mí” siempre se lo ha creído y yo que era la única que le dejaba las cosas claritas con respecto a eso fui la primera en caer… así que imagínate como será ahora… Solo espero que no olvide que en el fondo sigue siendo un niño… Y él sabe que soy la única que puedo recordárselo y hacerle caer de la nube en la que está.
-Eres mala… cuando te veo así me das miedo…
-Tranquila, no os vais a quedar sin el gran Tom Kaulitz… Solo digo que si alguna vez nos encontramos espero que no se olvide nunca de quien es y de donde viene porque yo conozco una faceta suya que nadie más conoce.
-En serio me das miedo… Pero imagino de que faceta estas hablando, y si te digo la verdad, no imagino a Tom en esas situaciones…
-Te sorprenderías, Alice, pero no quiero destrozar su reputación… Ya sabes, solo quiero que sea feliz, y si siendo así lo es adelante, pero si alguna vez empieza a creerse una especie de “súper hombre” sé cómo bajarle de la nube… simple, pero eficaz…
-Espero que no tengas que enfrentarte a él de ese modo… Sería un escándalo…
-Nah… Imagino los titulares: “Ex novia despechada cuenta la verdad sobre…” No me gusta, prefiero el anonimato. Prefiero que sea cara a cara. Nada de anuncios en Internet ni programas del corazón. No es mi estilo.
-No te lo comas mucho de vista… Ya te he dicho que tiene tela…
-Bueno, ¿y Tom? Sinceramente no creo que sea tan macho como dice ser…
-Y no lo es. Siempre ha sido muy exagerado y farda demasiado. Pero no es así… Al menos no cuando yo lo conocí. Antes no era el egocéntrico que es ahora. Era un chico normal. Bueno, lo de “todas se enamoran de mí” siempre se lo ha creído y yo que era la única que le dejaba las cosas claritas con respecto a eso fui la primera en caer… así que imagínate como será ahora… Solo espero que no olvide que en el fondo sigue siendo un niño… Y él sabe que soy la única que puedo recordárselo y hacerle caer de la nube en la que está.
-Eres mala… cuando te veo así me das miedo…
-Tranquila, no os vais a quedar sin el gran Tom Kaulitz… Solo digo que si alguna vez nos encontramos espero que no se olvide nunca de quien es y de donde viene porque yo conozco una faceta suya que nadie más conoce.
-En serio me das miedo… Pero imagino de que faceta estas hablando, y si te digo la verdad, no imagino a Tom en esas situaciones…
-Te sorprenderías, Alice, pero no quiero destrozar su reputación… Ya sabes, solo quiero que sea feliz, y si siendo así lo es adelante, pero si alguna vez empieza a creerse una especie de “súper hombre” sé cómo bajarle de la nube… simple, pero eficaz…
-Espero que no tengas que enfrentarte a él de ese modo… Sería un escándalo…
-Nah… Imagino los titulares: “Ex novia despechada cuenta la verdad sobre…” No me gusta, prefiero el anonimato. Prefiero que sea cara a cara. Nada de anuncios en Internet ni programas del corazón. No es mi estilo.
Las chicas charlaron durante largo rato y cerca ya de la una del mediodía Alice y Sam se despidieron hasta esa misma tarde para ir a comprar las entradas para el gran concierto.
Después de comer algo, Sam entró de nuevo en su habitación y la sintió vacía. Había pasado una buena mañana después de todo. La sonrisa cálida de Bill al verla inundó su mente y no pudo evitar que en sus labios se formara una tímida sonrisa. Como los había echado de menos… No había sido hasta que los había visto en el aeropuerto que se había dado cuenta de lo mucho que los extrañaba y de lo guapos que se habían puesto…
Después de comer algo, Sam entró de nuevo en su habitación y la sintió vacía. Había pasado una buena mañana después de todo. La sonrisa cálida de Bill al verla inundó su mente y no pudo evitar que en sus labios se formara una tímida sonrisa. Como los había echado de menos… No había sido hasta que los había visto en el aeropuerto que se había dado cuenta de lo mucho que los extrañaba y de lo guapos que se habían puesto…
Al pie de la cama encontró una fotografía y se agachó para cogerla, se le habría caído a Alice de la emoción… La miró con alegría y recordó el momento en que se la habían hecho…
Era verano, tenían 13 años. Simone y Gordon, el padrastro de los gemelos, querían llevar a los chicos a un lago que se encontraba en las montañas cercanas a la ciudad. El sitio era acogedor y era precioso. Se quedarían en una cabaña de madera una semana. Pero los gemelos se negaban a ir si no iba Sam con ellos. Por aquel entonces para Simone y Gordon, Sam era ya como una hija más así que aceptaron en seguida a llevarla con ellos. Pero el problema era que su madrastra la dejara ir con ellos. Simone sabía los maltratos que la querida amiga de sus hijos sufría y más de una vez se había peleado con aquella odiosa mujer por hacerle eso a una niña como Sam, pero ambos, Simone y Gordon, hablaron muy seriamente con el padre de Sam y éste la dejó ir. La pequeña saltó, gritó y lloró de alegría. Iba a pasar la mejor semana de su vida. No iba a ser la primera vez que durmiera con los gemelos, ya desde pequeños se había quedado en su casa y dormían juntos, pero sí era la primera vez que se iba con ellos de vacaciones lejos de su madrastra.
Era verano, tenían 13 años. Simone y Gordon, el padrastro de los gemelos, querían llevar a los chicos a un lago que se encontraba en las montañas cercanas a la ciudad. El sitio era acogedor y era precioso. Se quedarían en una cabaña de madera una semana. Pero los gemelos se negaban a ir si no iba Sam con ellos. Por aquel entonces para Simone y Gordon, Sam era ya como una hija más así que aceptaron en seguida a llevarla con ellos. Pero el problema era que su madrastra la dejara ir con ellos. Simone sabía los maltratos que la querida amiga de sus hijos sufría y más de una vez se había peleado con aquella odiosa mujer por hacerle eso a una niña como Sam, pero ambos, Simone y Gordon, hablaron muy seriamente con el padre de Sam y éste la dejó ir. La pequeña saltó, gritó y lloró de alegría. Iba a pasar la mejor semana de su vida. No iba a ser la primera vez que durmiera con los gemelos, ya desde pequeños se había quedado en su casa y dormían juntos, pero sí era la primera vez que se iba con ellos de vacaciones lejos de su madrastra.
El viaje se les hizo muy corto y en seguida, en cuanto bajaron del coche se pusieron los trajes de baño y se zambulleron en el agua. Estaba realmente helada pero no les importó en absoluto. Estaban los tres juntos y eso era lo que importaba. Fue una semana que no olvidarían en mucho tiempo. Y cuando dejaron el lago atrás, los tres amigos se miraron y con esa mirada juraron volver juntos algún día…
Sam sonrió. En aquel tiempo aún era feliz, aún seguía viendo a Tom como un amigo, como su hermano mayor, no había sido hasta el verano siguiente que sus hormonas le jugaron una mala pasada… Se tumbó en la cama aún con la sonrisa dibujada en su rostro. La foto mostraba las tres caras sonrientes de unos amigos que habían pasado de todo juntos y que seguían unidos a pesar de todo… Quiso que aún fuera así… Quizá, si… Sonrió aún más ampliamente, levantándose de la cama y poniendo la foto en el cuadro de corcho donde tenía las fotos recientes de su amiga y ella, y abriendo de nuevo el armario sacó de la caja una foto en la que estaban los cinco amigos juntos y la colocó al lado de la del lago… Sonrió ampliamente. Era hora de olvidar el pasado y vivir el presente.
Miró el reloj, aún eran las tres y media de la tarde. Aún quedaban dos horas hasta que volviera a encontrarse con Alice, así que se sentó en el sillón y sacando la libreta volvió a escribir su ajetreada vida.
Sam sonrió. En aquel tiempo aún era feliz, aún seguía viendo a Tom como un amigo, como su hermano mayor, no había sido hasta el verano siguiente que sus hormonas le jugaron una mala pasada… Se tumbó en la cama aún con la sonrisa dibujada en su rostro. La foto mostraba las tres caras sonrientes de unos amigos que habían pasado de todo juntos y que seguían unidos a pesar de todo… Quiso que aún fuera así… Quizá, si… Sonrió aún más ampliamente, levantándose de la cama y poniendo la foto en el cuadro de corcho donde tenía las fotos recientes de su amiga y ella, y abriendo de nuevo el armario sacó de la caja una foto en la que estaban los cinco amigos juntos y la colocó al lado de la del lago… Sonrió ampliamente. Era hora de olvidar el pasado y vivir el presente.
Miró el reloj, aún eran las tres y media de la tarde. Aún quedaban dos horas hasta que volviera a encontrarse con Alice, así que se sentó en el sillón y sacando la libreta volvió a escribir su ajetreada vida.
"Los próximos días después de aquello fueron para mí una auténtica pesadilla, no comía, no dormía… Sabía que mi forma de comportarme no era la más adecuada pero aún así no podía evitarlo. Me seguía viendo estúpida. Sabía que él nunca iba a ser para mí y siendo tan orgullosa como era no podía evitar que las lágrimas regresaran a mis ojos noche tras noche… Me sentía verdaderamente estúpida.
Dos o tres semanas después aún no controlaba mis cambios de humos repentinos ni mi comportamiento para con mis amigos y Bill lo sabía, aunque yo nunca se lo conté, él sabía lo mal que lo estaba pasando.
No tengo muchos recuerdos de esas semanas. Solo sé que aquella adolescente de 14 años que respondía al nombre de Samantha no era yo en realidad… Solo era una sombra, un espectro… Y cualquier persona de mi entorno puede confirmarlo. Andaba arrastrando los pies, con la cabeza gacha siempre ausente de lo que pasaba a mi alrededor, mis movimientos eran lentos y torpes a causa de la falta de alimento en mi sangre, mi rostro pálido y mis enormes ojeras también hablaban por mí, en mi rostro no podía leerse expresividad alguna y en mis ojos sólo brillaba el dolor. Y teniendo en cuenta como solía vestir nadie se libró de tener que calificarme como un bicho raro… Solo mis chicos permanecían a mi lado y, estúpida de mí, fui lo bastante idiota de apartarlos cuando no debí.
Dos o tres semanas después aún no controlaba mis cambios de humos repentinos ni mi comportamiento para con mis amigos y Bill lo sabía, aunque yo nunca se lo conté, él sabía lo mal que lo estaba pasando.
No tengo muchos recuerdos de esas semanas. Solo sé que aquella adolescente de 14 años que respondía al nombre de Samantha no era yo en realidad… Solo era una sombra, un espectro… Y cualquier persona de mi entorno puede confirmarlo. Andaba arrastrando los pies, con la cabeza gacha siempre ausente de lo que pasaba a mi alrededor, mis movimientos eran lentos y torpes a causa de la falta de alimento en mi sangre, mi rostro pálido y mis enormes ojeras también hablaban por mí, en mi rostro no podía leerse expresividad alguna y en mis ojos sólo brillaba el dolor. Y teniendo en cuenta como solía vestir nadie se libró de tener que calificarme como un bicho raro… Solo mis chicos permanecían a mi lado y, estúpida de mí, fui lo bastante idiota de apartarlos cuando no debí.
Bill siempre venía a verme por las tardes después de ensayar con el grupo y me obligaba a ir a con él hasta el centro comercial. Nunca le agradecí lo que hizo por mí. Fui muy estúpida. Y estoy prometiéndome a mi misma a agradecerle todo esto y más si me lo vuelvo a encontrar.
Y en una ocasión me vi arrastrada hasta el estudio donde ensayaban. Sentada en el sofá escuchaba una y otra vez las canciones que interpretarían el próximo sábado en otro concierto en otro pub de la misma ciudad. No podía creerme que no se cansaran de hacer todo esto, cuando sus seguidores solo se podían contar con los dedos de una mano, yo incluida. Pero ellos eran siempre muy optimistas. “Ya veras, Sam, algún día triunfaremos por todo el mundo y tú vendrás con nosotros donde vayamos...” solían decir. Yo sólo me limitaba a apoyarlos y a sonreír. Pero ese día no estaba para fiestas. Bueno, ni ese ni otro... Mientras que la música sonaba y Bill cogía su micro yo me vi sumergida en mi mundo donde él no existía, donde él no podía entrar y donde no existía el dolor ni el sufrimiento, un mundo para mí, hecho especialmente para mí…
Y en una ocasión me vi arrastrada hasta el estudio donde ensayaban. Sentada en el sofá escuchaba una y otra vez las canciones que interpretarían el próximo sábado en otro concierto en otro pub de la misma ciudad. No podía creerme que no se cansaran de hacer todo esto, cuando sus seguidores solo se podían contar con los dedos de una mano, yo incluida. Pero ellos eran siempre muy optimistas. “Ya veras, Sam, algún día triunfaremos por todo el mundo y tú vendrás con nosotros donde vayamos...” solían decir. Yo sólo me limitaba a apoyarlos y a sonreír. Pero ese día no estaba para fiestas. Bueno, ni ese ni otro... Mientras que la música sonaba y Bill cogía su micro yo me vi sumergida en mi mundo donde él no existía, donde él no podía entrar y donde no existía el dolor ni el sufrimiento, un mundo para mí, hecho especialmente para mí…
-¡Sam! – oí que alguien me llamaba desde el horizonte de mi mundo imaginario. Una voz que reconocí de inmediato
-¿Qué? – respondí tras dar un largo suspiro despidiéndome de mi mundo para volver a la cruel realidad.
-¿Dónde estabas?- preguntó Tom, inútilmente
-No me he movido de aquí, Tom…. – contesté de mala gana
-Ya sabes a qué me refiero – protestó él.
-Solo estaba pensando…
-Últimamente estás muy rara, Sam… Pareces un fantasma…- agregó Georg para echar más sal a la herida
-¿Qué? – respondí tras dar un largo suspiro despidiéndome de mi mundo para volver a la cruel realidad.
-¿Dónde estabas?- preguntó Tom, inútilmente
-No me he movido de aquí, Tom…. – contesté de mala gana
-Ya sabes a qué me refiero – protestó él.
-Solo estaba pensando…
-Últimamente estás muy rara, Sam… Pareces un fantasma…- agregó Georg para echar más sal a la herida
Fantasma. Me gustó la palabra. Si, creo que me definía bien…
-Sam, sabes que puedes contar con nosotros para lo que sea, cualquier cosa… Solo tienes que llamar… Confía en nosotros… Si hay algo que te preocupa, que no nos hayas contado, ya sabes que aquí nos tienes, para lo que sea. – Gustav consiguió con esto algo que no había hecho en semanas. Una sonrisa se curvó en mis labios.
-No hay de qué preocuparos, chicos. Estoy bien. Solo que ahora, digamos, que me vuelto más solitaria, por decirlo de algún modo…
-La soledad no es un buen amigo- Bill saltó con su filosofía…
- Lo sé, Bill, pero me gusta – hice especia énfasis en la última palabra. – me gusta estar sola, a solas con mis pensamientos… Es una sensación… agradable…
Bill me miró a los ojos y supo qué era lo que me pasaba. Todo aquello era por culpa de otra persona, no porque yo me hubiera hecho amiga de la soledad...
-No hay de qué preocuparos, chicos. Estoy bien. Solo que ahora, digamos, que me vuelto más solitaria, por decirlo de algún modo…
-La soledad no es un buen amigo- Bill saltó con su filosofía…
- Lo sé, Bill, pero me gusta – hice especia énfasis en la última palabra. – me gusta estar sola, a solas con mis pensamientos… Es una sensación… agradable…
Bill me miró a los ojos y supo qué era lo que me pasaba. Todo aquello era por culpa de otra persona, no porque yo me hubiera hecho amiga de la soledad...
Genial!!! otro capitulo que me encanta!!!
ResponderEliminarHELLO!!!!!!!!!!!! SOY TU PEOR PESADILLA... BNO EN REALIDAD NO... SOY LO MAS ALEGRE K AY EN TU LIFE Y KRIA DECRTE K NO TE HUNDAS NEVER XK TU VALES MUXO Y LA PEAZO IISTORIA K AS CREAO VALE MOGOLLON Y K TE KRO MUXO... Y A VER CNDO PONES A MAS ALICE Y BILL Y MENOS TOM Y SAM K TB TMGO DEREXO.... BNO SIGUE ASI CAMPEONA MUXOS KISSES
ResponderEliminarTU BEST FRIEND
Muy bueno!
ResponderEliminarVenga sigue asi que se te reconoze el esfuerzo.
Saludos.
ahh... no es posible
ResponderEliminaracaso soy la única tonta q llora por esta historia jaja... x deeoozz soy tan infantil no puedo evitar las lagrimas
me encantaaaaaaaaaa...!!!!